Lectura: Los dueños del ritmo
La tragedia cotidiana que oculta «Los dueños del ritmo» se desarrolla a lo largo de una sola tarde.
No necesita su autor más tiempo para construir un personaje tan complejo y divertido como Vicente Carrillo Fowler, ese ejecutivo que ha llegado a lo más alto del escalafón empresarial de su provincia a golpe de estrategia, falta de escrúpulos y mano izquierda.
La novela ‘Los dueños del ritmo’ de José Eduardo Tornay se acerca al mundo de las traiciones que se cometen para alcanzar una vida mejor, y a la falta de escrúpulos como característica de la sociedad de su obra. El libro es una road-movie ambientada en Andalucía, dónde los protagonistas son los extrarradios, los ejecutivos, los carnavales violentos y los cementerios. Parapetado en su Seat Ritmo, símbolo y refugio de una vida más digna, Vicente recorre el paisaje de una Andalucía sureña y extrema esquivando la tristeza que supone mirar atrás y reconocerse en un pasado mejor.
‘Los dueños del ritmo’ contiene una sucesión de particulares sainetes, que el autor denomina «estampas», en la que Tornay logra recrear con mirada cínica y certera los distintos ambientes en los que transcurre, ya sean insípidas urbanizaciones de piscina y alarma noctura o el carnaval gaditano.