Salvador Gómez de Simón encarna al poeta que esgrime el lenguaje narrativo y la estructura clásica —principio, nudo y desenlace— para celebrar los caminos del pensamiento.
A través de Los Diez Cánticos Elementales, ascenderemos, como en una escalera de perfección, desde la soledad y la búsqueda de la esencia hasta el canto universal a toda la Creación; pasando por parajes de música, amistad, —como no— amor y preguntas que se nos irán desvelando como claves.
Y como viajeros de la vida, encontraremos ante nuestra mirada los temas fundamentales que, como máscaras tras el carnaval, nos ocultan el todo, la nada, lo ido y lo por venir.
Salvador es poeta que, afanosamente, y dejándose la piel en el empeño, transmite el atisbo de un verso que como una vela inmortal nos alumbra a todos los demás mortales. Su poesía vibra, encandila, canta a la desesperación, al amor natural, al amor sublime más allá de la luz. Consigue que la música de Mahler se transforme en bellísimos versos.