«La lectura de estos poemas produce un efecto de sinceridad, de palabra directa al lector, verdadera… El punto de partida de los textos da paso a un reflexión sobre la condición humana o una cierta condición humana, la de quien cree en la vida con sus alegrías y sinsabores, en la humanidad, la de quien se conmueve con las penalidades de los otros, la de quien piensa que la escritura no ha de renunciar a una cierta función de denuncia y acaba pidiendo compasión para todos. La lectura de este libro no defraudará.»
Túa Blesa
Aventura
El compañero de mi vida lee un libro sobre Kafka.
Al cruzar el pasillo yo lo miro de refilón:
tiene su rostro la expresión de un niño,
ese gesto que teníamos cuando leíamos tebeos,
lee como si el libro fuera un libro de aventuras.
Y algo en mí rie para adentro,
algo se pone alegre, muy alegre.
Me bebo un vaso de agua
y brindo por la dicha que me espera.