La mujer calva es una historia sencilla, en absoluto simple, que comienza cuando Lailja, una mujer divorciada, tiene que instalar en su casa a su madre enferma. Reaparecen entonces, en forma de vívidas imágenes, los recuerdos solapados y contradictorios que alimentan sus mentiras de siempre. Sin embargo, ya no queda ni aquel equilibrio inestable sobre el que había construido su vida: en esta ocasión no puede permanecer pasiva, tiene que tomar decisiones, completar un giro que la reconcilie consigo misma. Acertadamente considerada por la crítica como una de las narradoras más interesantes del panorama actual, Cristina Cerrada penetra en esta historia de argumento sutil con una agudeza e intuición sorprendentes; con un manejo de la información y de las imágenes con el que logra una novela que puede considerarse, sin lugar a dudas, redonda.