Lectura: Al otro lado de la raya
Lectura: Al otro lado de la raya
María Luisa de LeónInfantil y Juvenil
M.A.R. Editor, 2019
ISBN: 9788417433116
Idioma: español
De la mano de su hermana mayor Rosa, Elías Bandrés, de siete años, huérfano de la Guerra Civil española, ingresa en un orfanato en una ciudad lejos de su pueblo. El hospicio lo regentan monjas que atemorizan al pequeño con sus tocas blancas. En el internado le separan de su hermana.
De la mano de su hermana mayor Rosa, Elías Bandrés, de siete años, huérfano de la Guerra Civil española, ingresa en un orfanato en una ciudad lejos de su pueblo. El hospicio lo regentan monjas que atemorizan al pequeño con sus tocas blancas. En el internado le separan de su hermana. El abandono, el rigor del entorno, los niños desconocidos y en ocasiones burlones, le llevan a sufrir pesadillas; niño de lágrima fácil, recuerda los consejos de su hermana, y decide que nadie más le sorprendería llorando, así que a menudo se repite: “¡Soy valiente!”.
Elías es curioso e inteligente y pronto aprende a dominar los miedos, la tristeza y se adapta a la difícil convivencia con otros niños, con las monjas, el maestro y el cura. Aunque no deja de recordar a su hermana, su pueblo y su perrita Naika, y espera verlos pronto. A menudo revive el viaje que le llevó hasta el orfanato, las cosas que vio por el camino: árboles, campos, flores. En las impresiones de Elías, nutridas por los cuentos mágicos, aquel pájaro de plumas blancas que casi se metió en el autobús y “El Tejo” –el árbol misterioso– adquieren un significado especial, porque tiene una visión fantástica de cuanto le rodea. De los niños de la casa, le llama la atención Felipe, un chico tartamudo de ojos grandes al que todos rechazan, y que llegará a ser su mejor amigo. Durante siete años comparte con él aventuras y estudios. Se crea entre ellos un vínculo que enriquecerá sus vidas.
Afirma la autora: “Me traslada a esa infancia posguerra de la que tanto se ha escrito y aún queda por escribir. Es un mundo cargado de interrogaciones, preguntas vagas que no se contestan. Cicatrices que todavía perduran por la dureza de sus heridas. Testigo de todo ello fue mi marido que me impulsó a escribir esta novela. Este texto trata de confrontar el rigor de las vivencias de unos niños inocentes, fantasiosos, con la entrañable relación de afecto y amistad que perdurará en el tiempo.”