Un grupo de cruzados católicos hospedado en el Monasterio de Piedra, ha perdido de forma ignominiosa en el Juicio de Dios que les enfrentó a los herejes occitanos.
En el duelo pierde la vida Jacques, escudero, lanza de Paul al que unía una estrecha relación sentimental. Richart, sargento de a caballo, lanza de Bernard, agoniza inconsciente en la enfermería del convento. Junto a él, y también gravemente herido debido a la mutilación de su mano derecha, se encuentra Ferdinand, jefe de la mesnada, mariscal del Conde de Etelnon. Hasta ese momento era quien capitaneaba la patrulla. El joven Pierrot, sobrino ahijado del Conde, también sufrió duras heridas durante el enfrentamiento, pero una de las herejes, Menta, sacerdotisa pagana protegida por el Conde de Almir, cura sus heridas al igual que hace con las de Ferdinand y Bernard. A partir de ese momento Pierrot no puede dejar de pensar en ella. Paul Flambeau, heredero del Conde de Etelnon, profundamente abatido por la muerte de Jacques, está sumido en una depresión que le mantiene al margen de todo cuanto sucede. Ibeloki, de origen palestino y esclavo del Conde, queda al cuidado de los heridos.
“Cercle II (Por los montes ibéricos)”, segunda parte de “Cercle, al otro lado de los pirineos”, se conforma como una novela histórica de viajes y aventuras que sumerge al lector en las costumbres, sistema de valores y creencias del siglo XIII a través de una persecución por la accidentada geografía de parte de la Península Ibérica.