Polo es infeliz. Le atormenta un hecho acaecido en el pasado cuando apenas tenía veinte y pocos años y toda la vida por delante sonriéndole. Esto hace que tenga problemas serios con su pareja, Gabi, que le pide que vaya al psicólogo para intentar resolverlos.
Hacía diez años que Polo y Blanca no se veían, desde que se produjera un episodio de extraordinaria violencia que desencadenó la disolución del grupo musical donde ambos tocaban a finales de los años noventa. Una tarde de invierno, Polo descubre a Blanca entre la gente que camina por una céntrica calle de Madrid. Así, lo que comienza como una conversación trivial entre dos viejos amigos pronto derivará en un doloroso tránsito al pasado. La revelación de aquellos inquietantes hechos dieron como resultado la desaparición del grupo y ahora, años más tarde, todavía amenazan con devorarlos.
Un buen chico es una fascinante historia narrada por medio de múltiples conversaciones cruzadas cuyas piezas encajan como un perfecto mecanismo de relojería. Para ello, el autor se vale de una voz intimista y de un ritmo narrativo de gran intensidad que atrapa al lector desde la primera página y acaba enfrentándolo con uno de los abismos más oscuros del ser humano: la culpabilidad y el deseo.