Nutriéndose del género de aventuras, y ambientando la acción a caballo entre un tiempo mítico y el histórico, Ariadna en Naxos nos lleva desde el rapto de Europa hasta la entrada de Teseo en el laberinto, pasando por el nacimiento del Minotauro o la muerte de Icaro, y ofrece, al ensamblar todas las historias, una metáfora de las contradicciones de la cultura occidental.