Nadie podía haber imaginado el futuro que esperaba a las hermanas Montenegro cuando Conchita y Juanita decidieron subirse a un escenario en el Madrid de los felices veinte bajo la atenta mirada de la mayor, Justa. Conchita se convertirá en una gran estrella de Hollywood gracias a sus películas con Buster Keaton, Leslie Howard o Charles Boyer. Juanita, proletaria de los escenarios, conocerá desde los lujosos casinos brasileños hasta los teatros judíos de la Europa central previos a la llegada del nazismo. Justa será pionera del doblaje en la España de la II República del brazo de un empresario fascista italiano. La Guerra Civil hará saltar sus vidas por los aires y las tres decidirán desvanecerse en un mundo que nunca volverá a ser el mismo. La Europa de entreguerras, los Estados Unidos del crack del 29, la Francia frentepopulista, la Italia mussoliniana, la Latinoamérica de las dictaduras y la España franquista serán los escenarios de tres vidas partidas por dos Españas.